Poemas


Lento, tan lento
el árbol se ha desnudado bajo la avivada mirada
negra,tan negra en la antesala de las ramas
se re-corta el ave
una nota, una sola
blanca, tan blanca
un grito crudo
tenaz
como la infancia deshabitada…

(Bord à Bord - Éditions Arcam - 1985 -
Traducción: Soraya García Bernardo)


Abre ella el vientre gris
del cielo.
Un cuchillo entre los dientes,
hurga las entrañas
para extraer de ellas
lo que todavía podría quedar
de Dios.

(Des taches sur la robe - Éditions du Cygne - 2009
Traducción: Federico Gómez Camey)


Tú eres mi hombre, mi árbol,
la tierra en que se funden mis cielos.
Tú eres mi fuerza, dulce rayo
que libera las alas de la luz,
la piedra en la que descansa
mi fragilidad.
Tú eres a quien invoco en secreto,
el océano de mis viajes,
la orilla a la que se amarran mis sueños.

Tú eres mi hombre, árbol firme
que perfila en la tinta de los espacios
el grito vertical y apelado del amor.

(Terres d'Envol - L'Ancrier Éditeur - 1994 -
Traducción: Soraya García Bernardo)


Por todas partes la tensa mano de los rezos
entre ruido y orilla del silencio.
Pero no sabes ver
más que la sombra del cementerio,
puerta cerrada de las palabras,
tiempo de negativas interiores.
Por todas partes el manto de las libertades,
pero no sabes más que pisotear
el espesor de las hojas desgarradas,
el pasto atado al limite de sus miedos,
la tierra seca, polvo muerto.
Por todas partes el deseo de amar,
pero no sabes
que escuchar
es abandonarse.

(Marche en la demeure - Éditions Editinter - 2000
Traducción: Luis del Rio-Donoso)